lunes, 9 de junio de 2008

Que alguien nos ayude

(Chicago) Ése es el pedido de todos los peruanos tras la humillante caída ante México por 4-0 en la ciudad de Chicago. Perú fue sinónimo de “nada” y se comió una goleada que nos pone a temblar cuando se enfrente a Colombia, este sábado, ahora sí por las Eliminatorias.El partido se inició con un Perú con mucha actitud. Incluso, a los 2’, tras un buen centro de Solano y mal rechazo de la defensa azteca, Mariño probó de larga distancia aunque con muy poca fortuna. Parecía que la floja actuación ante España había servido para correguir errores. Pero, apenas fue un espejismo.A México le bastó una llegada para desnudar los defectos de una defensa peruana que, en vez de mejorar partido a partido, hace todo lo contrario. Nuevamente lo más débil de Perú: sus laterales. A los 5’, la ‘Pinza’ Hernández descuidó la marca y llegó el primero a través de Arce. Y sólo tres minutos después, un error de Salas permitó a Guardado poner el 2-0 parcial.Con el 2-0 a favor, México paró la mano. Se esperaba entonces la reacción peruana, pero ésta nunca llegó. Apenas una acción individual de Mariño que el mismo marró frente al portero Sánchez a los 16’ fue lo único realmente peligroso para el cuadro de ‘Chemo’ del Solar. A México sólo le bastó pisar otra vez un poco el acelerador para elevar la cuenta a cuatro gracias a los tantos de Vela, tras un regalo de Forsyth, a los 21’ y de Arce, a los 28’, que anotaba su segundo personal.Con el 4-0 en contra, Perú desapareció por completo del campo. No tuvo reacción de ningún tipo, por el contrario, empezaron a aparecer más errores aunque por obra y gracia divina el marcador no se iba a mover más en el primer tiempo.Se esperaba alguna respuesta de José del Solar para el segundo tiempo, y lo que hizo fue mandar al campo a Vargas (Hernández) y Neyra (Chávez) para tratar de darle más salida por la banda izquierda y más fútbol a la volante, en ese orden. También entró Prado (Salas). Los cambios dieron cierto resultado pues Perú tuvo más el balón y México ya no llegaba con tanta facilidad al arco de Forsyth. Aunque en materia ofensiva seguía en debe, pese a la entrega de Guerrero.Y es que cada centro de Vargas o pase de Mariño en profundidad para el 'Krieger', éste lo terminaba perdiendo por la cantidad de mexicanos que le caían encima.Si no hubiese sido por Forsyth y por el horizontal a los 68’ y 70’, respectivamente, tal vez se estuviera hablando de un marcador de escándalo, aunque ello realmente al final no hubiera importado por lo ofrecido por la selección peruana en sus dos amistosos. Ahora se viene Colombia y sólo un milagro, sin duda, podrá aclarar el panorama sombrío en el que se encuentra sumido el equipo de ‘Chemo’.

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